Al cabo de tanto tiempo, se levanta uno con el ánimo, aún, a flor de piel, sabiendo que ahí fuera se a enfrentar a abordar la gratuidad del mal, o enfrentarse a asuntos turbios, incómodos, que otros tamizan, rehúyen o filtran a los medios de comunicación, como si fueran meras anécdotas de ficción.
Yo vivo y escribo en, y de un mundo real, con sus correpondientes submundos y bajos fondos, que están a la vuelta de cualquier esquina. Otros, que viven en las urbes de todo tipo, ignoran o quieren no acordarse, de que, en las cloacas y al mismo tiempo que desarrolla su existencia, viven las ratas y lo obvian hasta que una o varias salen al exterior. Metáfora verdadera de la vida, de las ciudades, de la supervivencia.... intensa y de atmósfera espesa, asfixiante. Seguimientos, persecuciones, esperas febriles de sujetos sospechosos, de sicarios, de fugitivos, psicópatas convencidos de que todo el mundo les deben la vida, en una existencia tan insalvablemente determinada entre ricos y pobres, LOS LUJOS DE ALGUNOS SE PAGAN CON LAS MISERIAS DE OTROS.
Relatos brutales de lo cotidiano, en el que siempre, a éstas alturas, se está de vueltas, un duro aprendizaje que entronca, finalmente con la sabiduría de la Vida.....
-JACH-