El futuro de cincuenta millones de habitantes de esta Nación dependen de las decisiones del " Capitán Tan ". Millones de niños y de adolescentes no podrán desarrollarse en unas condiciones más o menos dignas, como hasta ahora de manera ficticia lo venían haciendo, y cientos y cientos de buenos profesionales, del campo, de la construcción, de la industria, de los servicios, o de escalas más cualificadas, administrativos, sanitarias, bancos, seguridad, turismo, podrán tener trabajo o no. Tantas ilusiones de gente joven quebradas... ¿ las tiene presente el " Capitán Tan " ? ¿ está capacitado ( si alguna vez lo estuvo ) para arrostrar esa responsabilidad ?
No, no tiene solución, con él, no. Ha desaprovechado la oportunidad de ser el líder de todos y todas las ciudadanas de éste País ( o de lo que queda de Él ).
A nosotros, los ciudadanos, no nos importan en absoluto un pulso político entre el " Capitán Tan " y " Locomotoro ", si la figura de uno es más elegante que la del otro, o si uno es más simpático que el otro. Nos preocupa más bien esa perenne e hipócrita sonrisa bobalicona que trasluce el mundo de fantasías animadas de ayer y de hoy, en el que vive el " Capitán Tan ".
Cuando lo votaron fue justo a los pocos días de los desgraciados sucesos del 11-M. Aquellas elecciones, tenían que haber sido aplazadas, porque, tras ocurrir el ignominioso hecho terrorista en pleno " periodo de reflexión ", no se respetó, y ese manipuló ese espacio.
Más que correcto hubiese sido librarlas cuando el pueblo no hubiese estado ccondicionado por una propaganda pseudo-fascista, de mucho interés y con mmucha prisa... En buena lid, quizás hasta hubo un defecto de forma que invalidaba su legitimidad. Con el paso del tiempo ( y aún quedando muchas dudas ) y el apasionamiento, la gente hubiese visto el tema con mucho más claridad, aunque siga callando...
El ciudadano, en general, ya lo he dicho en anteriores escritos, ha perdido totalmente el protagonismo que debería de tener y se encuentra absolutamente aborregado. Se le manipula, se le engaña y me atrevería a decir que hasta se le somete. Los políticos llenan totalmente todo el panaroma... Se hacen tan importantes que el pueblo idiotizado, boquiabierto queda anodadado cuando abren la boca ( mintiendo una y otra vez ), de sus gestos, y solo sirve para tratar de interpretar y adivinar sus maquiavélicas intenciones y sus suspiros.
Lo vuelvo a iterar, hay una fórmula democrática en la que el ciudadano y la ciudadana puede manifestar su voluntad en situaciones tan graves como las que ahora se viven: ELECCIONES ANTICIPADAS.
Las cabezas preclaras de señoras tales como, Doña Esperanza Aguirre o Doña Rosa Díez, por ejemplo, seguro que tienen y buscarían las soluciones apropiadas y muchísimas personas tendrían la oportunidad de colaborar en la elección de su propio destino, ya que es sensato dejar las ideologías cuando no estamos jugando el pellejo y el sustento, y porque el clima es el apropiado para el clamor popular.-
- JACH -