- -Me imagino que todo empezó con los porteros electrónicos o automáticos. Fue por culpa de esos inventos que las puertas de las casas empezaron a cerrarse " carcelariamente " y sofisticando cada vez más el aislamiento: cámaras de vigilancia, blindajes varios, rejas, severidad y rigor a la hora de acercarse a un cajero automático tratando de que no te descubran el número pin, y mucho miedo... y muy poca vergüenza.----------------------------------------
- -Más cámaras por las calles, por las autovías, en los hiper y supermercados, sistemas de videovigilancia para ver que hacen los peques en la guardería y parques, y no hablar ya de sí hay que coger un avión o un tren ( aunque sea el de cercanías ), una humillación diaria. Tarde o temprano tenía que descubrirse el " Gran Hermano ", se llama SITEL y la alegre controversia es dotarlo del amparo legal o no, después de llevar funcionado unos cuantos años.---------------------------------------------------------------------------------------- -Personalmente debo de reconocer que a mi me la trae al pairo, las " garantías oficiales " ( que no existen por otra parte ) con las que se acompañe su aplicación, me preocupa el sistema mismo capaz de rastrear ( una vez más ) todos mis movimientos y los de la gente que se vaya a comunicar conmigo, hasta crear a mi alrededor una tupida malla de inseguridad; pero, es que yo a su vez puedo entrar en contacto con alguien que esté siendo seguido por SITEL y de esa manera entrar en una vorágine sospechosa que terminará grabando mi vida y mi circunstancia. Ya sé que sin previa orden judicial esa información no tiene ninguna validez si acompaña a alguna imputación, pero eso no es lo que me inquieta, lo peor es que una serie de señores y señoras, de personas, de funcionarios tan imperfectos como yo ( y que para defecar hacen lo mismo que los demás, de que también se mueren como todo el mundo... ), con sólo apretar un botón puedan disponer de todos los datos referentes a mi vida y a mi entorno...----------------------------------------------------------------------------------
La reflexión no es baladí y no vale salir al paso con una majadería de qu el que no tiene nada que esconder, no tiene nada que temer, porque si quiero esconder, escondo lo que me de la gana ( y no lo váis a saber nunca ) y por esa regla de tres sobrarán y sobran de facto todos los derechos que protegen la intimidad, logrados con el sudor y la sangre de mucha gente que se dejaron la vida en el empeño.... ¡¡ anda... si tenéis honra reflexionad !!
Dicen que SITEL es sólo un programa informático y que su bondad o maldad ( ¿ quién asevera lo uno y lo otro.... uno que también va al water a cagar al igual que yo? ) depende del uso que se le de. No es cierto..................---------------------
- -Es una amenaza en si misma, por sí misma y por quien la maneja y se vale de ella ( algunas veces por intereses espurios e ilícitos ), por la desproporción de su capacidad frente al sujeto y la indefensión en la que queda la persona que ignora que con razón o sin ella, está siendo observada y escuchada en sus conversaciones profesionales o privadas o de la índole que sean.-----------------
- -Este escrito que redacto en un ordenador puede estar siendo leído y archivado por la Policía.----------------------------------------------------------------
- -Cualquier guarda de seguridad privada de un aeropuerto o de una estación ferroviaria puede saber la marca y talla de mis calzoncillos, si llevo en los bolsillos ansiolíticos o visualizar cuantas prótesis llevo implantadas. Un sms de mi móvil llega antes al terminal de " marras " que al destinatario. ¿ La gente puede vivir así ? Por lo visto sí, porque no veo a nadie protestar, quizá porque en su subconsciente saben que es el resultado a demandar tanta seguridad.----
- -El eterno debate entre seguridad/orden y libertad/dignidad/intimidad, lo está perdiendo este último trinomio como seres humanos. Una bajada de pantalones colectiva.--------------------------------------------------------------------
- -Habrán muchos que estén de acuerdo, a mi me parece indigno y un oprobio.--J-
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