Domingo, 12 de junio de 2011







La Policía y los servicios de Inteligencia están buscando intensamente los tres isótopos radioactivos robados en Madrid. España elevó un informe a la Agencia Internacional de la Energía Atómica: vea el documento


Una banda organizada robó el pasado domingo tres fuentes radioactivas de la empresa Aplicaciones Tecnológicas, ubicada en Pozuelo de Alarcón (Madrid). Desde ese día, las Fuerzas de Seguridad están en alerta ante el riesgo para la salud de los ciudadanos que pueden suponer los isótopos.


Agentes de la Policía y de los servicios de Inteligencia han recibido la orden de encontrar, “de manera urgente”, los tres isótopos, según explican las fuentes consultadas por El Confidencial Digital. Los expertos aseguran que hay un temor ante la posibilidad de que puedan ser manipuladas.


Los isótopos, tal y como fueron robados, no entrañan ningún riesgo radiológico, gracias al embalaje en el que se encuentran protegidos. Sin embargo, si se manipulan, sí pueden provocar daños radioactivos en las personas. Deben, por tanto, mantenerse cerradas.


El Consejo de Seguridad Nuclear, máximo órgano nacional encargado de estos asuntos, ha venido manteniendo durante la última semana reuniones extraordinarias para conocer los últimos detalles de la investigación. Desde el primer momento, se puso en conocimiento del Ministerio del Interior la sustracción y se trasladó su preocupación por los riesgos de pueden producirse.


De momento, no se sabe nada del paradero de las tres fuentes. Solo se ha emitido una alarma para pedir a “cualquier persona que localice la caja debe evitar su manipulación y avisar inmediatamente a las autoridades, Policía o servicio de atención de urgencias (112)”.


Se trata de Cesio 137 y Californo 252 (que tiene una vida muy corta). Ambos elementos se utilizan para temas médicos y para calibración de maquinaria pesada. En el momento de la sustracción, se encontraban dentro del embalaje habitual (de 12x12x15 cm) y en el interior de una caja fuerte.


Las primeras investigaciones policiales, según las fuentes consultadas por ECD, apuntan a un robo por encargo de una banda organizada. En la denuncia que interpuso la empresa aparece reflejado, además del la sustracción de los tres isótopos, la desaparición de varias herramientas, documentación y 2.000 euros en metálico.


Informe a la AIEA


La dirección general de Energía Nuclear, dependiente del Ministerio de Industria, elevó el lunes pasado un informe a la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA). El máximo organismo mundial en la materia ha sido el encargado de supervisar la crisis nuclear tras el terremoto de Japón.